Cuando estudiamos la economía de mercado, vimos que un factor importante a la hora de fijar los precios de los productos que consumimos es la publicidad y la propaganda que pueden hacer que se genere una mayor demanda del producto con el consiguiente aumento de los precios.

La publicidad es necesaria pero, a veces, resulta engañosa y trata de inducir a la compra por seducción. En este caso, un sector muy influenciable es la población infantil. Se suele encontrar en productos que ellos consumen con frecuencia, como las «chuches».

Hace unos días, encontramos en las tiendas de dulces de Pamplona unos caramelos muy atractivos para los chicos de corta edad. Lo de menos son los caramelos, Lo de más es el contenedor en el que se encuentran: son tubos con futbolistas de equipos famosos.

Futbolista con caramelos

Está claro que muchos insistirán a sus padres para que les compren los caramelos pagándolos mucho más caros que si fueran en una bolsa normal.

¿Quién se puede resistir a tener el equipo del Barça al completo?